La Asociación “Cartagena, Ciudad de los Submarinos” rechaza el cambio de ubicación del submarino Tonina y reclama el cumplimiento del proyecto original

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La Asociación “Cartagena, Ciudad de los Submarinos” rechaza el cambio de ubicación del submarino Tonina y reclama el cumplimiento del proyecto original

 

La Asociación Cartagena, Ciudad de los Submarinosmanifiesta su firme rechazo al reciente cambio de criterio adoptado por el Ayuntamiento de Cartagena respecto al futuro del submarino Tonina (S-62), tras conocerse la decisión de renunciar a su exposición en la Plaza de la Marina Española para considerar su traslado a los túneles del Espalmador, en el monte de Galeras.

El proyecto original, fruto de años de diálogo, debate, y colaboración entre el Ayuntamiento, la Armada y la Comunidad Autónoma, y respaldado por una parte significativa de la ciudadanía cartagenera, preveía la musealización del Tonina junto al Museo Naval y el submarino Isaac Peral, en el corazón del frente marítimo de la ciudad. Esta opción, ya parcialmente financiada y proyectada, ofrecía una solución viable, coherente y accesible, tanto para residentes como para visitantes.

Desde nuestra asociación, queremos expresar seis razones fundamentales por las que consideramos totalmente erróneo e improcedente este cambio:

1. Rompe un proyecto institucional consolidado. El plan original representaba un modelo de colaboración ejemplar entre Ayuntamiento y la Armada, largamente trabajado y consensuado. Modificar su rumbo para dirigirlo hacia otro plan en el que hay que iniciar hasta los primeros pasos, no solo genera desconcierto, sino que compromete la confianza y la estabilidad del trabajo conjunto entre administraciones.

2. Aleja el patrimonio naval del corazón de la ciudad. El Espalmador se encuentra a casi cinco kilómetros del casco histórico, en una zona aislada, de difícil acceso para el turista medio. Incluso en automóvil particular, el traslado presenta serias limitaciones logísticas, reduciendo notablemente su potencial como recurso turístico para Cartagena.

3. Desaprovecha el emplazamiento ideal de la Plaza de la Marina Española. Esta ubicación, junto al Museo Naval, la Puerta del Arsenal, la Sala del submarino Peral, la Batería del Muelle de Barcas y la Plaza de los Héroes de Cavite, constituye el conjunto patrimonial más caracterizado de la Armada en Cartagena. Integrar el Tonina en este entorno supone un homenaje pleno a su historia, y una atracción patrimonial y turística de primer nivel, bien conectada con el Puerto y los principales circuitos turísticos.

4. El nuevo proyecto implica enormes sobrecostes y dificultades técnicas. Adecuar los túneles del Espalmador exige obras de gran complejidad e impacto económico, como la excavación de un dique de más de 80 metros dentro de roca viva, su impermeabilización y acondicionamiento. Todo ello en un entorno natural de difícil gestión, con graves problemas de filtraciones y acceso.

5. Reiniciar todo el proceso es un retroceso innecesario. Comenzar desde cero un nuevo proyecto, cuando el anterior ya contaba con respaldo institucional, social y financiero, solo puede traducirse en demoras de varios años. Esta decisión condena al Tonina a seguir degradándose en Navantia sin fecha clara de apertura al público.

6. Rompe el consenso ciudadano. El emplazamiento en la Plaza de la Marina fue ampliamente aceptado, tras un largo proceso,por la ciudadanía, las asociaciones culturales y los expertos en patrimonio. Era universalmente considerado el mejor lugar posible para rendir tributo al legado submarinista de Cartagena.

Por todo ello, desde la Asociación Cartagena, Ciudad de los Submarinos exigimos que se retome el proyecto original, se reactive de inmediato la partida presupuestaria ya aprobada por la Comunidad Autónoma, y se garantice la continuidad del proyecto que consideramos más efectivo y dignopara la musealización del Tonina. Un proyecto al alcance de Cartagena.

Cartagena no puede permitirse perder otraoportunidad. El Tonina merece ser preservado, reconocido y mostrado con orgullo a cartageneros y visitantes. Y eso solo será posible si se mantiene el rumbo ya trazado y se respeta el compromiso adquirido con nuestra historia naval y con la ciudadanía.