El S-81 vuelve a ponerse a flote tras su varada y se prepara para nuevas pruebas

El S-81 vuelve a ponerse a flote tras su varada y se prepara para nuevas pruebas

El S-81 vuelve a ponerse a flote tras su varada y se prepara para nuevas pruebas

Cartagena, 23 diciembre de 2022.- El astillero de Navantia en Cartagena ha puesto a flote de nuevo este viernes el submarino S81 Isaac Peral, una vez finalizados los trabajos que debían realizarse en seco. Tras la maniobra, el buque ha quedado amarrado en el muelle, donde se preparará para sus próximas pruebas de puerto y de mar.

El S-81 se encuentra en la fase final de su periodo de pruebas, un procedimiento reglado y muy exigente, destinado a comprobar y, en caso necesario, corregir y optimizar el funcionamiento de todos los sistemas del submarino y sus componentes.

Tras los trabajos acometidos en dique seco se realizarán nuevas pruebas, incluyendo navegación en superficie, inmersión, navegación en inmersión e inmersión a cota máxima. Todo el periodo de pruebas se lleva a cabo con el máximo rigor, con participación de personal de Navantia, la Armada y el Ministerio de Defensa, con el fin de certificar la excelencia en calidad y operatividad del buque.

En paralelo, Navantia continúa con la construcción de los otros tres submarinos de la serie. La primera unión del casco resistente del segundo submarino de la serie 80, el S-82 ‘Narciso Monturiol’ se ha realizado ya en el astillero.

El programa S-80 es el mayor desafío tecnológico afrontado por la industria española. Con él, España refuerza su autonomía estratégica al convertirse en uno de los escasos países que diseñan y construyen sus propios submarinos. Navantia se convierte en Autoridad Técnica de Diseño. El S-80 supone un salto tecnológico para el arma submarina española, con un sistema integrado de control de plataforma, un sistema de combate y un sistema de armas con capacidad de lanzar misiles tácticos, una capacidad única entre los submarinos no nucleares de la OTAN.

Sobre Navantia:

Navantia es un referente mundial en el diseño, construcción e integración de buques militares de alto componente tecnológico, destinados tanto a la Armada española, lo que hace de ella una empresa de carácter estratégico, como al mercado internacional. Sus líneas de actividad incluyen el diseño y fabricación de sistemas de combate y de mando y control, sistemas integrados de control de plataforma, direcciones de tiro, plantas propulsoras y apoyo al ciclo de vida. Con su apuesta por la diversificación y las energías renovables, se ha convertido además en un actor relevante en el ámbito de la eólica marina. Navantia pertenece al Grupo SEPI, un holding empresarial que abarca un total de 15 empresas públicas participadas de forma directa y mayoritaria, con más de 78.000 profesionales.