Una oficina ayudará a familias y propietarios a acceder a los 3,5 millones de ayudas para rehabilitar viviendas
El Ayuntamiento de Cartagena ha sacado a licitación una Oficina de Rehabilitación, cuya finalidad es asesorar a familias y propietarios a acceder a los 3,5 millones de euros en ayudasque el Consistorio destina a la rehabilitación energética de viviendas, y que podría facilitar a los ciudadanos proyectos de obra, asesoramiento y la gestión de los trámites necesarios.
Las empresas interesadas tienen de plazo hasta el próximo 20 de marzo y el presupuesto base de licitación es de 217.600 euros, impuestos incluidos. Los detalles se pueden consultar aquí.
La alcaldesa, Noelia Arroyo, ha explicado que el coste de esta oficina “está contemplado en las condiciones de la subvención que hemos obtenido de la Unión Europea de 3,5 millones, gracias al excelente trabajo que realizan los servicios públicos municipales para obtener recursos que ayuden a los cartageneros”.
La alcaldesa Noelia Arroyo ha estimado que estas ayudas alcanzarán a 272 viviendas en Cartagena de las zonas con más necesidades, focalizadas en el casco histórico de Cartagena, y los barrios de San Antón y Los Dolores-El Plan. Para ello, se reserva la cuarta parte de los fondos para subvencionar al 100% las obras de las familias con menores ingresos.
Noelia Arroyo ha recordado que "normalmente, las personas que más necesitan estas ayudas son las que tienen menos posibilidades de lograrlas por falta de información o por incapacidad económica para gestionarlas. Por eso vamos a redoblar esfuerzos para encontrarlas y por eso les garantizamos cubrir todo el gasto que realicen en la rehabilitación de sus casas”.
Además, el Ayuntamiento se reunirá con las asociaciones y colectivos de los barrios para dar a conocer estas ayudas “que reportarán un considerable ahorro en la factura de la luz de las familias y a mejorar las condiciones de habitabilidad de estas casas, haciéndolas más confortables climáticamente”.
La subvención se establecerá en función del ahorro energético que suponga la obra, que debe ser de un mínimo del 30%.