Salud implanta la donación de plasma en el hospital Santa María del Rosell en Cartagena

Salud implanta la donación de plasma en el hospital Santa María del Rosell en Cartagena
En solo un mes se han llevado a cabo 27 procedimientos de plasmaféresis o separación del plasma de la sangre.
Las instalaciones ubicadas en el hospital de Cartagena han sido renovadas para ofrecer el mejor servicio a los donantes.
15.07.2025 La Consejería de Salud ha implantado la donación de plasma en el hospital general universitario Santa María del Rosell en Cartagena. El Centro Regional de Hemodonación cuenta ya con una nueva zona totalmente rehabilitada en este hospital, lo que permitió la puesta en marcha el pasado mes de junio del programa de donación de plasma en el municipio de Cartagena.
En sólo un mes, el punto de extracción instalado en el edificio de Consultas Externas del centro cartagenero ha registrado 27 donaciones de plasma y, desde enero, se han realizado 1.124 donaciones de sangre.
La plasmaféresis es un procedimiento médico que consiste en la separación del plasma de la sangre. Se utiliza para tratar algunas enfermedades autoinmunes, renales y en personas trasplantadas, entre otras.
El consejero de Salud, Juan José Pedreño, visitó hoy la nueva zona del hospital del Rosell que ha sido completamente remodelada “para poder implantar la plasmaféresis en el municipio de Cartagena y ofrecer un mejor servicio a los donantes de sangre que, con su generosidad, ayudan a salvar vidas”.
El proceso de donación, tanto de sangre como de plasma, requiere una serie de pasos consecutivos y ordenados con unas necesidades y características imprescindibles propias de cada uno de ellos. En este sentido, Pedreño explicó que “nuestra obligación es asegurar no solo la confidencialidad del donante, sino también su seguridad, vigilancia y confort, y para ello se hizo necesario redistribuir y remodelar los espacios”.
Las mejoras realizadas, en las que se han invertido 86.000 euros, permiten que pueda haber cuatro personas a la vez realizando una donación efectiva en las instalaciones de donación; otras cuatro en el área de recuperación; cuatro personas más en la zona de espera y, adicionalmente, un donante en el área de reconocimiento médico, junto al menos un administrativo y dos enfermeros.
Más de 1.000 donaciones de plasma
El año pasado, el Centro Regional de Hemodonación registró 1.007 donaciones de plasma, que se emplea para tratar enfermedades como la hemofilia y algunos tipos de inmunodeficiencia. Además, desde que se puso en marcha el programa de plasmaféresis en la Región de Murcia, se ha quintuplicado el número de donantes, al pasar de 114 en 2022 a más de 600 en la actualidad.
Se calcula que en la Región hay unas 2.500 personas afectadas por una de las enfermedades raras más comunes, que pueden tratarse con medicamentos derivados del plasma. Para su producción, son esenciales las inmunoglobulinas producidas a partir del plasma humano, ya que no se pueden sintetizar.
El tratamiento de la hemofilia es un ejemplo del impacto de las terapias derivadas del plasma. Hoy día, los pacientes que padecen esta enfermedad y reciben un tratamiento adecuado desde la infancia, tienen una esperanza de vida semejante a la de la población general y relativamente pocos episodios de hemorragia, gracias al tratamiento con Factor VIII.
Antes de que esta terapia estuviera ampliamente disponible, la esperanza de vida media de los pacientes con hemofilia grave era de 11 años.
Más de 120 puntos de donación este verano
El Centro Regional de Hemodonación intensifica su labor de captación de donantes de sangre en verano para hacer frente a la demanda durante el período estival. A tal fin, se han habilitado más de 120 puntos de donación y las unidades móviles del centro recorrerán más de 10.000 kilómetros a lo largo de la Región en busca de la solidaridad de la ciudadanía.
En julio, la campaña se intensifica con itinerarios que incluyen los hospitales públicos de las nueve áreas de salud, así como puntos de extracción móviles en zonas de playa. El objetivo es mantener un suministro constante y concienciar a la población sobre la necesidad permanente de componentes sanguíneos, también en vacaciones.