Salud este verano las 194 piscinas públicas de la Región inspección para garantizar sus condiciones higiénicas y sanitarias
Salud este verano las 194 piscinas públicas de la Región inspección para garantizar sus condiciones higiénicas y sanitarias
Estas inspecciones incluyen la comprobación de que se cuenta al menos con un socorrista con experiencia acreditada durante todo su horario de funcionamiento.
Las piscinas privadas también deben tener un mantenimiento adecuado para prevenir infecciones.
20.07.2025 Como cada verano, la Consejería de Salud inspeccionará las piscinas públicas de la Región de Murcia a fin de garantizar la prevención de riesgos para la salud derivada de su uso. El programa de vigilancia sanitaria desarrollado por la Dirección General de Salud Pública y Adicciones, a través del Servicio de Sanidad Ambiental, intervendrá este año en 194 instalaciones.
Con el objeto de garantizar una calidad del agua óptima para el baño y el cumplimiento de la normativa de piscinas, el servicio de Sanidad Ambiental realiza la inspección y control de las condiciones higiénicas y sanitarias que, además, incluye la comprobación de que estos establecimientos cuentan al menos con un socorrista con experiencia acreditada en salvamento y primeros auxilios. Este debe permanecer en las instalaciones durante todo el horario de funcionamiento de la piscina.
El director general de Salud Pública y Adicciones, José Jesús Guillén, explicó que las enfermedades infecciosas asociadas al uso de las piscinas se deben principalmente a una desinfección incorrecta del agua de la instalación o de las superficies de la piscina y vestuarios.
“Debido a que en verano hay un gran número de usuarios en este tipo de instalaciones, y que se produce el intercambio de diversos objetos como toallas, peines o flotadores, se aumenta el riesgo de transmisión de enfermedades y de proliferación bacteriana”, indicó Guillén.
Por ello, desde Salud Pública recomienda secar completamente la piel después del baño, especialmente entre los dedos de los pies, para evitar el asentamiento de los gérmenes.
Además, desde el Servicio de Sanidad Ambiental se recuerda a la ciudadanía la importancia de mantener unas condiciones higiénico-sanitarias óptimas en las piscinas privadas a fin de evitar infecciones cutáneas o gastrointestinales, así como problemas del oído y oculares.
Para ello, es necesario mantener niveles adecuados de pH y desinfectante; que las piscinas cuenten con sistemas eficientes de filtración mantenidos adecuadamente; ducharse antes de medirse en la piscina; que los niños utilicen pañales adecuados para el medio acuático; y evite el baño si se presentan síntomas gastrointestinales o cutáneos.
“La piel lesionada puede ser la puerta de entrada de los microorganismos y las personas inmunodeprimidas tienen un riesgo superior a contraer enfermedades infecciosas en estas instalaciones que el resto de bañistas”, explicó Guillén.
Desde la Consejería de Salud se recomienda que los menores estén siempre acompañados en la piscina donde se vayan a bañar, que además ha de contar con las medidas adecuadas de seguridad, como socorrista o vallado perimetral, para que no puedan acceder libremente.
Los niños han de estar vigilados en todo momento cuando están en el agua o jugando cerca de ella, y si el menor no sabe nadar o no nada bien, es necesario ponerle un chaleco de flotación.
Recomendaciones en la playa
Es esencial respetar las normas de seguridad en la playa y enseñar a los niños el significado de las banderas. Con menores y personas de edad avanzada es mejor bañarse siempre en playas con vigilancia y respetar siempre las indicaciones de los socorristas.
Por otra parte, el consumo de alcohol antes de darse un baño en una playa o piscina disminuye la capacidad de reacción ante un peligro, y puede propiciar conductas que pueden poner en riesgo la salud.
Salud aconseja abstenerse del baño de noche en la playa, ya que si ocurre un contratiempo es más difícil pedir ayuda por la poca visibilidad y que alguien pueda percatarse, así como en zonas no autorizadas como pozas, embalses, ríos y cursos de agua turbios por su peligrosidad y por su posible afección al medioambiente.
Finalmente, tanto en playas como en piscinas es importante adoptar las medidas para protegerse de los efectos del calor como hidratarse de forma continua, evitar la exposición solar en las horas centrales del día, o mantenerse a la sombra, usar fotoprotector frente a la radiación UVA, UVB e Infrarrojos tipo A, aplicarlo media hora antes de la exposición al sol, cada dos horas y tras el baño, utilizar sombrero y gafas de sol.