Montanaro: LAS MARCAS DE LA MENTIRA. UN GOBIERNO SIN CRITERIO

LAS MARCAS DE LA MENTIRA. UN GOBIERNO SIN CRITERIO.

Érase una novela, o no, donde podría centrarse en la investigación de un caso de negligencia, de cómo puede haber muerto la mamá, el papá, la abuela, el abuelo o el hermano de cualquier españolito de a pie estúpidamente creído que está protegido por quien lo desprecia, máxime cuando se teje la maraña de estupideces justificativas con un renovado interés ideológico y con interrogantes continuos de efectividad en torno a los sucesos y, por cómo muere ese protagonista anónimo, convertido en un desgraciado guarismo casi ignorado, allí aparecen los adornos enmascarados que conducen a su muerte, a la de casi 30.000 almas, estas sin monitorización gubernamental, ni para contarlos.

Para sus investigaciones, la protagonista de fortuna no está sola. Por un lado, recibe información permanentemente, pero adulterada desde todos los frentes de información posibles, incluidos los gubernamentales. Éste, le envía mensajes dándole datos acerca de los casos y hace las veces de un speaker de acontecimiento virtual o de un detective de motel barato.

Llama el vicepresidente por accidente, con la complacencia del otro…, parásitos a los conservadores en el Congreso por destacar sus amarronadas por no decir enmierdadas vergüenzas y venganzas, ¡parásitos! Y lo dice el jefe de la comunista canaria que sintetiza el virus como un ajusticiamiento natural a la vejez que tanto odian en Podemos, ya querían cercenar el voto a los mayores de 65 años,,,, pero la culpa de este descontrol anárquico sanitario en España y la aberración en las residencias no es de él, que le importa una mierda, y lo ha demostrado, es del soberbio sin causa, del doctor plagio o príncipe de la mentira, y esto es hemeroteca, hasta ahora no censurada por el fraude ministerial de interior, en el 36 quemaron los libros y periódicos, pero ahora lo tienen difícil, ha mentido el extinto en el 95% de su carrera política, lo hizo antes del traidor amancebamiento con terroristas, comunistas y golpistas después de, como San Pedro haberlos negado, y lo sigue haciendo, “asinque”, nadie se fía del “génares”, de hecho, Europa no se fía de España ante la gestión sanitaria tan tediosa, confusa y desastrosa y la gestión de la brutal crisis económica en la que nos hemos sumergido gracias a este gobierno de república bananera bolivariana -es como nos ven-, quiere ir muy despacio  y controlando a estos fariseos y fariseas de cartera ministerial que se gastan su dinero en chiringuitos de verbena solidaria, coladeros de ayudas enmascaradas y aborregadas de la falsa izquierda progresista jacobina aburguesada, y hay ejemplos claros, el BOE da sentencia notarial y los decretos aprobados en estados excepcionales como el de ahora los mantienen.

Mas pronto que tarde aparecerán esas manos negras que protagonizan las compras fallidas con un halo de delincuencia encubierta, son hechos, el clientelismo social comunista ha sido protagonista incluso en esta lamentable situación, alguien ha puesto el comisionado cazo en las compras, “No Compras”, y además, el poco interés demostrado por analizar a la población, determinante y necesario es de juzgado de guardia, estamos exportando millones de test rápidos al resto de Europa, y aquí a por uvas, hechos los “No hechos”  y sumando los fallutos productos de la estafa ¿quizás no necesitamos para volver a la normalidad saber quién está o ha estado contagiado?, increíble la incompetencia.

Festividad de los trabajadores, a propósito de los parásitos, buen momento para que los sindicatos se autofinancien y desaparezcan los liberados y sus nóminas, solidaridad con el compañero, el más listo los defiende altruistamente…, así como las financiaciones millonarias a partidos políticos, tras el panorama que se presenta.

Lo único cierto y tangible es que vamos camino de los 30.000 muertos, más de 40.000 sanitarios contagiados después de trabajar como suicidas y dónde han muerto más de medio centenar, ojo, por culpa de ellos según el gobierno, incluso dos meses después denuncian los sanitarios la protección con bolsas de basura, pero seguro que es otro bulo marlaskero, y se van, mueren 30.000 oficiales y 50.000 oficiosos de los más indefensos, los que pasaron hambre en una posguerra lúgubre, injusto final para los que tanto hicieron por este país que levantaron de la ruina con sudor y esfuerzo, con escasez y penuria, con unidad y generosidad, y han sido víctimas de la más ruin e inepta clase política que nos han castigado al ostracismo domiciliario como delincuentes, como ratas de laboratorio en un cruento experimento marxista, un gobierno que, incluso en esta desagraciada situación siguen hipotecados por la ideología dictatorial comunista y por sus compañeros de prostíbulo político, golpistas independentistas y tardo terroristas separatistas.

Las marcas de la mentira se difuminan en una invisible frontera entre lo mediocre y lo etéreo, las mentiras son aceptadas como verdades entre los aborregados seguidores de estos hipócritas de taberna y sus medios de comunicación comprados y prostituidos por una facción sectaria dónde manipulan y adulteran la realidad, son los mismos que aliviaron las conciencias sediciosas tras los atentados de Atocha en contra del gobierno legítimo, oíamos a la SER y leíamos en El País entre otros medios progres a sus comunicadores y comunicadoras, hoy vestidos con la piel de la moderación pero encarnando a una jauría de perras rabiosas manipuladoras, nombres propios progres que se creen jueces de la información escondidos tras los micrófonos y los teclados a los que se suman los sectarios de la prensa prostituida, hoy por ayer estaríamos en estado de guerra, el COVID por un lado y los progres en las calles por otro, alentados por los, Ferreras, Gabilondos, Oteros y Barcelos entre otros y otras con discursos erráticos adornados de moderación unos y unas pero un mensaje cruel, ya lo vimos en Barcelona, incendiando y tomando las calles, y animando a la desobediencia manipulando los hechos, y ahora este indecente presidente acusa de antipatriotas a los que no le hacen el juego, quiere hacer lo que le mande Iglesias y encima que se le aplauda, no he visto personaje más soberbio, arrogante y peligroso. Craso error de Casado si lo apoya.

¿Y ahora qué?, en semanas volvemos a la “nueva normalidad” con una ristra de piojos políticos a la espalda, ahora que necesitamos el talento español, ese que se ha expulsado, acusado, discriminado y despreciado para sacar esta España de la ruina, y en vez de talento, ¿qué tenemos? mediocres, a Sánchez e Iglesias y a su corte, bien es cierto que por algún extraño algoritmo, quizás el de Euclides parece ser que, está contraindicado el talento con la progresía. “Asinque”, se nos presentan 4.000.000 de españoles en ERTES, SÍ, cuatro millones, a los cuales no se quien ni como nos van a pagar y el 60% no vuelve a trabajar por cierre de empresas, es más, siendo optimista podrán retomar la actividad un millón y entrando en detalles…, si a esto sumamos autónomos, 8 millones, así, de sopetón, los mismos despreciados por el gobierno, estafados por las autonomías y ninguneados por los ayuntamientos, no hay que ser un talento, ni ser de derechas para hacer números, de ellos no volverán ni la mitad a su trabajo y son los que viven al día, ¿dónde quedó aquel verdadero estado de bienestar de Aznar?, otro hecho. Tras la mofa propagandística de lo mal llamado desescalada, no olvidemos que este gobierno se creó para y por la propaganda comunista, y cargándose por derivada directa el 25% del PIB en torno al turismo, los cierres de restaurantes, bares y pequeños comercios amenizarán las famosas cartillas de razonamiento que Sánchez le reprochaba a Iglesias en campaña electoral y éste, se las ofrecía como buen proxeneta de este equipo que nos gobierna. Ahora es Caritas quien está, otra vez con sus voluntarios dando la talla con la solidaridad de empresas y el pueblo español a esas colas de racionamiento socialistas ya instauradas con cartillas rojas. Las marcas de la mentira, nos recuerda que la “verdad” suele tener diferentes aristas.

Ahora toca un ERTE permanente al medio millón de políticos y derivados varios que viven de nosotros. Por cierto, un parásito es un organismo animal o vegetal, que vive a costa de otro, alimentándose de él y debilitándolo sin llegar a matarlo, con lo que suele causarle algún daño o enfermedad. ¿Quiénes son los parásitos, y además miserables? -Todos los epítetos usados son de uso común en el Congreso y Senado-

Andrés Hernández Martínez