Rincón Literario de Paco Marín: "El testamento de los pasos perdidos"

TÍTULO: El testamento de los pasos perdidos
AUTOR: Natalia Gómez Navajas
EDITA: Almuzara (2025, febrero)
Encuadernación: Rústica con solapas. Tamaño: 15 x 23 cm. Número de páginas: 304. PVP: 19,95 €. ISBN: 978-84-10526-25-9
“El testamento de los pasos perdidos” hay que leerlo sí o sí. Redacción totalmente distinta a lo que Natalia nos tiene acostumbrados. Algo más que memorias es lo que nos vamos a encontrar y no sabremos dejar de leer hasta que llegamos a la última página y seguimos rebuscando.
Reitero hay que leer este testamento SÍ O SÍ.
Época actual. Logroño
Manuela, una abogada racional, recibe una llamada que lo cambiará todo: Palmira, su abuela, supuestamente muerta hace más de treinta años, quiere reencontrarse con ella. Incrédula pero cautivada, acepta la cita, sin imaginar que esta decisión la arrastrará al corazón de una conspiración europea enterrada en la historia familiar.
Décadas atrás, entre Europa y Puerto Rico
Palmira, una mujer adelantada a su tiempo, huye con su familia hacia América tras cometer un acto desesperado en la posguerra española. En Puerto Rico, el glamour de las fiestas y los círculos sociales oculta una vida marcada por la sumisión a un marido cruel. Pero su espíritu indomable la lleva de regreso a España, donde quedará atrapada en una red de espionaje, resistencia y alianzas prohibidas, tomando decisiones cargadas de peligro que cambiarán su destino para siempre.
Espías, traiciones y un legado que lo cambia todo
Entre mansiones llenas de secretos y oscuros pasillos de poder, los diarios de Palmira revelan una historia de valentía, sacrificio y decisiones que dejaron cicatrices imborrables. ¿Por qué su familia eligió condenarla al silencio? ¿Y qué precio pagó para protegerlos?
Un pasado que clama justicia
En este thriller histórico cargado de suspense, los fantasmas de la guerra, los lazos rotos y las decisiones de una mujer extraordinaria se entrelazan con las luchas del presente. Un viaje trepidante que desvela que, a veces, el precio de la verdad es más alto de lo que podemos soportar.
Natalia Gómez Navajas (Logroño, 1970) estudió la carrera de Gestión de Empresas en Madrid. Al finalizar sus estudios, regresó a su ciudad natal, donde actualmente reside. Compagina la escritura con la dirección de su centro de pilates y yoga. Es autora de las obras “Tras el objetivo”, “Buzali. El origen”, “El mago y la daga”, “Aras de venganza”, “La fiscal” y “Resurgir”. Además, ha colaborado en títulos como ‘En la fila’, ‘La trastienda’, ‘Un hombre muerto caminando’, ‘25MM’ y ‘De ley’.
Recibimos, de nuevo, a Natalia Gómez Navajas… Gracias…
P.- Por favor recuerde a los despistados quién es Natalia Gómez Navajas.
R.- Una mujer apasionada por lo que hace, con hambre de vida y sed de historias. Me atrae la complejidad de las relaciones humanas y la eterna búsqueda de identidad. Desde niña sentí que las palabras eran mi refugio, y desde entonces intento capturar con ellas esas experiencias que nos definen y nos rompen.
P.- ¿Cuándo, cómo y por qué nace "El testamento de los pasos perdidos"?
R.- La semilla de esta novela germinó en 2019, aunque llevaba tiempo latiendo en mi interior. Surgió de una necesidad íntima: dar voz a dos historias familiares que nunca se contaron del todo. Mis abuelos maternos emigraron a Venezuela en los años 40, y aunque elegí Puerto Rico como escenario, ya que el entorno social y económico se ajustaba a lo que quería contar. Por otro lado, mi abuela paterna vivió una experiencia desgarradora: tras encontrar una cubertería de plata en la casa donde servía, fue denunciada por la propietaria antes de poder hablar. La salvó el párroco del pueblo, pero no se libró del castigo: ricino y humillación pública. Contarlo fue también un acto de justicia.
P.- ¿Cómo se ha documentado?
R.- A través de la hemeroteca de La Rioja, de los recuerdos familiares que sobreviven al silencio y, sobre todo, gracias a las conversaciones con personas mayores que vivieron aquellos años en carne propia. No fue fácil: hubo que escarbar entre la niebla del tiempo y entre silencios cargados de dolor.
P.- ¿Por qué este título? ¿Es el original, o se manejaron varios?
R.- Es la primera vez que la editorial interviene en la elección del título. El que yo propuse no terminó de convencer, así que trabajamos juntos hasta encontrar uno que encapsulara la esencia de la novela. Creo sinceramente que dimos con el título perfecto: El testamento de los pasos perdidos habla de legado, de memoria y de todos esos pasos que no dejan huellas, pero construyen una vida.
P.- ¿Es su novela más personal?
R.- Sin duda. Es la novela que más tiempo me ha llevado escribir, no solo por la dificultad en la documentación, sino porque me removía por dentro. Dar vida a Palmira desde su infancia hasta la madurez supuso un viaje emocional que me obligó a salir de mi zona de confort. Escribir ciertas escenas con la naturalidad que exigía la época, pese a que hoy nos resulten intolerables, me hervía la sangre.
P.- ¿Cuál era su intención, o que perseguía al escribir "El testamento de los pasos perdidos"?
R.- Ante todo, es un homenaje a mis abuelas, a quienes está dedicada, y a todas esas mujeres anónimas que, en los años más oscuros de nuestra historia, sacaron adelante a sus familias con dignidad y coraje. También quería que los lectores reflexionaran sobre sus propias raíces y sobre cómo el pasado nos moldea sin que a veces lo sepamos. La novela es una invitación a mirar hacia atrás para entender quiénes somos.
P.- Venda su libro, ¿por qué hay que leer "El testamento de los pasos perdidos"?
R.- Porque en “El testamento de los pasos perdidos” hay verdad. Hay heridas, silencios, y una memoria que se resiste a desaparecer. Es una historia de mujeres valientes, de identidad y de resiliencia. Si alguna vez te has preguntado quién eras antes de saber quién eres, esta novela puede ser ese espejo. O esa herida que cicatriza al nombrarla. Porque a veces, solo al ponerle palabras al dolor, empezamos a entenderlo, y en ese acto de nombrar, de dar voz a lo silenciado, comienza también la sanación. Esta historia no solo habla del pasado: te susurra al oído que hay memorias que merecen ser contadas, aunque duelan.
P.- Sus planes a corto y medio plazo ¿son?
R.- A corto plazo, seguiré presentando la novela y compartiendo con los lectores no solo las páginas, sino también las cicatrices que hay detrás de ellas. A medio plazo, estoy inmersa en un nuevo proyecto que, por ahora, guardo en silencio. Lo que sí puedo decir es que seguiré escribiendo historias que duelan, que sanen y que dejen poso.