La Guardia Civil desmantela en Abanilla un grupo delictivo que cultivaba gran cantidad de marihuana
La Guardia Civil desmantela en Abanilla un grupo delictivo que cultivaba gran cantidad de marihuana
§ A los siete detenidos se les atribuye la presunta autoría de los delitos de pertenencia a grupo criminal, cultivo y elaboración de drogas y defraudación de fluido eléctrico
§ Se han desmantelado tres invernaderos indoor con más de medio millar de plantas de cannabis
§ La Benemérita ha contado con la colaboración con la Policía Local de Abanilla
Murcia, 25 de noviembre de 2025. La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco de los servicios establecidos para prevenir y perseguir el tráfico de drogas, ha desarrollado en Abanilla una operación en la que se ha desarticulado un grupo delictivo que cultivaba ilícitamente gran cantidad de marihuana, con la detención de sus siete integrantes, como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal, cultivo y elaboración de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
Durante la operación, los guardias civiles han desmantelado tres invernaderos tipo indoor instalados en una vivienda y otros dos inmuebles con más de medio millar de plantas en avanzada fase de cultivo y varios cientos de gramos de esta sustancia dispuestos para su inminente distribución. También se ha incautado gran cantidad de efectivo, un sofisticado sistema de video vigilancia de las instalaciones y todos los elementos utilizados para el cultivo de la droga.
Las actuaciones se iniciaron el pasado mes de octubre, cuando efectivos de Prevención de Seguridad Ciudadana de la Benemérita abrieron la operación para verificar una serie de indicios sobre la producción ilícita de marihuana en el municipio de Abanilla.
Los guardias civiles ubicaron poco después una vivienda en Barinas, término municipal de Abanilla, que, al parecer, se había destinado para el cultivo masivo de marihuana en invernaderos tipo indoor o de interior y estaba dirigida por un nutrido grupo delictivo.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, los guardias civiles han llevado a cabo la fase de explotación de la operación, en la que se ha practicado la entrada y el registro del inmueble y se han detenido a los siete integrantes del grupo delictivo como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal, cultivo y elaboración de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
Sofisticados sistemas de seguridad
La parcela donde se encontraban las plantaciones tenía instalada un sofisticado sistema de cámaras de vigilancia que cubría todo el perímetro, con el fin de controlar posibles movimientos en el exterior y proteger la plantación. En el interior, los investigadores localizaron una red de cableado y sistemas de seguridad conectados a un disco duro grabador, que permitía monitorizar toda la finca desde el interior de la vivienda.
La vivienda principal albergaba una sala de cultivo con un centenar de plantas de cannabis. En una construcción anexa, unida internamente a la vivienda principal, se localizaron dos dependencias adicionales destinadas también al cultivo masivo de marihuana con cerca de 300 plantas cada una, todas en avanzado estado de cultivo.
La vivienda principal tenía además una estancia destinada a la manipulación y preparado de la marihuana antes de su distribución, donde se hallaron plantas secas, balanzas de precisión y otros objetos, utilizados presuntamente para el pesado y envasado de la sustancia con destino al mercado ilícito.
Todas las estancias estaban dotadas de sofisticados equipos de iluminación, ventilación y control de humedad, además de filtros de carbono, transformadores, humificadores y productos de control de pH, conformando un completo laboratorio de cultivo indoor. Las paredes y techos estaban recubiertos con materiales aislantes y reflectantes, diseñados para evitar la detección por luz, olor o sonido desde el exterior.
Durante el registro, además de efectuar las detenciones, la Guardia Civil se incautó de toda la droga y los sofisticados dispositivos de iluminación, calefacción, riego y ventilación que componían los invernaderos y todos objetos empleados para la actividad ilícita ahora esclarecida.
Los investigadores también detectaron la existencia de una conexión fraudulenta a la red eléctrica, con la que se alimentaban los potentes equipos empleados para mantener operativa la plantación.
En el desarrollo de la operación, la Guardia Civil ha contado con la colaboración de la Policía Local de Abanilla.