El Partido Cantonal denuncia que Los Dolores y el Polígono de Santa Ana esperan un año la restauración del Huerto de las Bolas
Los Dolores y el Polígono de Santa Ana esperan un año la restauración del Huerto de las Bolas
Tanto el jardín como la decoración modernistapresentan un estado deplorable pese a su titularidad municipal y las promesas de adecuación delAyuntamiento
Otro proyecto que queda en el tintero. La Concejalía de Patrimonio Arqueológico, en manos de la vicealcaldesa, Ana Belén Castejón, anunció hace un año la adjudicación del plan director de recuperación del Huerto de las Bolas, antiguo jardín del emblemático edificio de la Torre Llagostera, de propiedad municipal desde 2007. Han pasado doce meses y los vecinos / deLos Dolores, El Bohío y el Polígono de Santa Ana / esperan alguna noticia de una iniciativa muy necesariaya que la diputación más poblada de Cartagena precisa de un pulmón verde semejante al que los habitantes decentro disfrutan con el Parque Torres, el Parque Antonio Vallejo Alberola o el Parque de los Juncos.
No menos importante resulta la restauración de los diferentes elementos modernistas con los que cuenta este jardín. Bancos, fuentes, miradores y escalerasconstruidos con mosaicos de azulejos partidos según la técnica del Trencadís que popularizara el arquitecto catalán Antonio Gaudí a principios del pasado siglo. En este sentido, el Ayuntamiento de Cartagena anunció la adjudicación del proyecto de rehabilitación del principal mirador y las vallas del Huerto de las Bolas ala Universidad Politécnica de Cartagena hace tres meses. Pero en la reciente presentación del presupuesto municipal de la Concejalía de Patrimonio Arqueológico, Ana Belén Castejón no hizo alusión alguna al mismo. Una vez concluido este trabajo, comenzaría un nuevo proceso de licitación de obras que también cayó en el olvido de la vicealcaldesa respecto asus planes para el próximo año.
Este conjunto monumental cuenta con unaextensión de 41.000 metros cuadrados y con la catalogación de Bien de Interés Cultural desde el año 2000. Sólo la casa colonial de la Torre Llagostera, deVíctor Beltrí, presenta buen estado de conservación después de su recuperación por parte de la iniciativa privada. En la actualidad, tiene uso de restaurante con una concesión municipal de veinticinco años por valor de 300.000 euros. El resto de la parcela muestra un estado deplorable pese a a su titularidad municipal y el valor artístico de la decoración del jardín.