Efemérides de Juan Manzanares García del 5 de noviembre
5 NOVIEMBRE
La frase de hoy.
Relájate. Hay cosas que llevan su tiempo, y otras que el tiempo se lleva.
JEAN VERGER
PERSONAJE DEL DÍA
ANTONIO DE ESCAÑO Y GARCÍA GARRI DE CÁCERES.
Nació el 5 de noviembre de 1752 en Cartagena, hijo de don Martín de Escaño y doña María Cristina García Garride Cáceres.
Sentó plaza de guardiamarina el ocho de julio de 1767, en la compañía de Cádiz, de la que era entonces capitán Jorge Juan. Terminados sus estudios embarcó en el navío “Terrible”.
Pasado el buque a Cartagena, Escaño fue destinado a los famosos jabeques que Barceló en el Mediterráneo hacía célebres por sus singladuras y, precisamente en uno de la división de este valeroso marino, en mayo de 1769 recibió el bautismo de fuego embarcado en el jabeque Vigilante, que apresó dos escampavías argelinas en aguas de Barcelona el once de mayo de 1769.
En abril de 1774 ascendió a alférez de navío y embarcó en el “Santo Domingo”, con destino a Montevideo.
De vuelta a Cádiz, supo que había sido ascendido a teniente de fragata; pasó a Cartagena, dedicándose con intensidad al estudio de la historia y de los códigos militares.
En 1778, sabedor el gobierno de sus progresos, le ascendió a teniente de navío y, estuvo embarcado en los navíos “Fénix” y “Santísima Trinidad” y después se encargó del armamento del “San Nicolás”, en cuyo destino se distinguió tanto que su comandante le recomendó para ayudante de la mayoría y de este modo empezó a poner en práctica los conocimientos que había adquirido.
Sirvió con el que había de ser su gran maestro, José de Mazarredo, el cual pronto conoció la capacidad de su ayudante.
Se impusieron la tarea de formar la mejor escuadra de la época. Así lo reconocieron los franceses en el canal, e incluso los mismos británicos, enemigos se admiraron de la pronta formación de la línea de combate, de la rápida colocación del navío insignia en el centro de la fuerza y del cierre de distancia de la retaguardia al grueso.
Mazarredo, con modestia, decía que la razón del éxito era la prontitud y acierto con que Escaño hizo obedecer sus órdenes.
Ascendió en 1782 a capitán de fragata.
En agosto de 1783 fue nombrado primer ayudante del subinspector del arsenal de Cartagena y este destino le sirvió en gran manera para aumentar sus conocimientos de construcción de buques y carenas, así como de los armamentos y administración de los almacenes generales donde estuvo destinado catorce meses.
Terminado este destino pasó Mazarredo a efectuar una reforma de las ordenanzas, pidiendo como auxiliar a Escaño.
Terminadas las ordenanzas, a mediados de 1793, y declarada la guerra a Francia, se le dio a Escaño el mando del navío “San Fulgencio”.
Una vez que pudo obrar por sí, implantó a bordo la nueva ordenanza, demostrando a los escépticos cuán buenos eran los frutos que era capaz de dar.
Después de algunas vicisitudes se le ascendió a brigadier y se le dio el mando del “San Ildefonso.
Terminando el año 1796 entregado al estudio y a la confección del “Diccionario de Marina” que redactaba en unión de Churruca.
Al empezar el año 1797 se le confirió el mando del navío “Príncipe de Asturias”, asistió al combate del catorce de febrero sobre el cabo de San Vicente. Con el navío de su mando atacó y maniobró contra la tercera parte de la escuadra enemiga que viraba por contramarcha. Con esta atrevida y oportuna maniobra, emprendida en el momento crítico del movimiento del enemigo, contuvo a la fuerza contraria que se dirigía a doblar la retaguardia de la escuadra española y contribuyó a salvar, con su hábil y arrojada resolución, los navíos Santísima Trinidad y Soberano, que sin su maniobra se hubieran encontrado sin defensa. El Príncipe de Asturias se portó eficazmente en el combate, y en el consejo de guerra en que se juzgó la acción nadie habló de Escaño sino para alabar su conducta y reconocer que su buque se había batido de manera extraordinaria.
Declarada nuevamente la guerra el doce de diciembre de 1804, pidió entrar en línea en los combates que debían ofrecerse; el gobierno le nombró mayor general de la escuadra a las órdenes del general Gravina, que exigió su nombramiento, Escaño empezó a ejercer sus funciones el veinte de marzo, embarcándose con este jefe en el navío “Argonauta”.
El nueve de abril apareció Villeneuve con la escuadra que había sacado de Tolón y se incorporaron a ella los seis mejores buques españoles, con un convoy que transportaba 2.000 hombres de todas las armas.
Ya en Cádiz la escuadra combinada, Gravina, una vez enterado del parecer de Escaño, sobre si atacar a los británicos o esperar el ataque de ellos en el fondeadero, le encargó el armamento de una fuerza sutil como la que había sido tan eficaz en 1797; mas Napoleón había dispuesto las cosas de otro modo, y así la escuadra salió a la mar para reñir la desgraciada acción del veintiuno de octubre, la batalla de Trafalgar.
Arbolaba Gravina su insignia en el “Príncipe de Asturias”, y en ese buque combatió heroicamente a su lado su mayor general.
Gravina le dio la consigna en una frase dicha cariñosamente, estrechándole la mano: "Pelear hasta morir", Escaño le contestó con una sonrisa. Al ser herido el general Gravina le dijo: "Continuar sin descanso la pelea", y así se hizo.
Poco después recibió Escaño un balazo en una pierna que le obligo a sentarse, mas sin perder la voz de mando ni dejar de atender a todo, dijo “No es nada” pero cayó desmayado.
Hecha la primera cura, se hizo subir de nuevo al alcázar. Logró organizar la retirada de los buques que pudieron hurtarse al desastre y después la salida, para procurar salvar las reliquias de la escuadra.
Al morir Gravina en sus brazos, en Cádiz, pronunciaba estas palabras “Mi bastón de mando, aquel que nunca se ha separado de mi lado, se entregará, en cuanto fallezca, al dignísimo general Escaño, como prueba pública de haberlo empuñado bajo mi nombre”.
El nueve de noviembre de 1805 fue ascendido a teniente general.
El veinte de enero de 1806 fue nombrado ministro del Almirantazgo.
El quince de marzo de 1807 era recibido como académico de la Historia.
El dos de mayo de 1808 participó del entusiasmo general. Rechazó los cargos que le ofrecía el gobierno. Se resistió hasta a los deseos de su maestro y entrañable amigo Mazarredo, jefe de la marina del rey José Bonaparte. Abandonado Madrid por los franceses, la Junta Central le nombro el quince de octubre, Ministro de Marina.
Dejó el ministerio de Marina el treinta y uno de enero de 1810, nombrado miembro del Consejo de Regencia que reemplazó a la Junta Central, disuelta poco después de la desgraciada batalla de Ocaña.
A este consejo se deben importantes medidas para la seguridad nacional y la reunión de las cortes.
Los regentes cayeron en desgracia de las mismas cortes que habían convocado, y fueron desterrados; Escaño, al reino de Murcia.
No obstante, se aplazó indefinidamente la ejecución de esta orden y continuó en Cádiz siguiendo de cerca el desarrollo de los acontecimientos.
Al salir de la Regencia, pasó a ocupar un puesto en el Consejo de Estado.
Conociendo su fin próximo, otorgó testamento, legando a sus herederos una hoja de servicio sin tacha; la rica colección de instrumentos náuticos fue repartida entre personas que los apreciasen y usasen.
A la vuelta de Fernando VII fue nombrado comandante general del departamento de Cartagena, destino que no llegó a desempeñar.
El día once de julio, después de emplear la mañana en la lectura y dar un corto paseo, regresó a su casa y sentado a la mesa para almorzar, murió de un ataque de apoplejía.
El trece de julio era enterrado, llevando su féretro por seis robustos granaderos de marina, de aquellos cuya instrucción tanto había cuidado; las cintas eran llevadas por Caballeros de Santiago e iba rodeado por veinticinco marineros y otros tantos artilleros de brigadas.
EFEMÉRIDES DE CARTAGENA DEL 5 DE NOVIEMBRE
©Juan Manzanares García
-1587. Los corsarios que merodeaban por nuestras costas lo hacían preferentemente en los meses de octubre y noviembre. Esta noche echaron a tierra de 500 a 700 turcos que se llevaron ganados de los vecinos, pero salieron éstos en gran número y consiguieron rechazarloshasta sus naves.
-1598. Se emite una Real Orden para dejar durante treinta días a Juan Vázquez de Obregón extraer de una mina que había descubierto de piedras finas, de amatistas negras y moradas, zafiros y otras piedras en el término de Cartagena, junto a la parte llamada Portmán.
-1611. Se expide una Cédula Real para que se funde un hospital donde puedan curarse los enfermos de la Armada y Galeras. Se crea el Hospital de Galeras en la plaza de Castellini.
-1752. Nace el Teniente General de la Armada, Regente de España y de las Indias, Don Antonio de Escaño y García Garro de Cáceres.
-1785. Se emite una Real Orden para que se construya el Campo Santo del Hospital militar.
-1810. Con gran solemnidad jura el Ayuntamiento el reconocimiento y acatamiento de las Cortes constituidas en Cádiz.
Además, y con motivo de estar la fanega de trigo a cien reales, se vende el pan desde hoy a 16 cuartos las 21 onzas.
-1820. Se celebra en Pozo Estrecho, la colocación de la lápida de la Constitución con descargas de salvas hechas por los milicianos, y con música y bailes.
-1823. Entran en Cartagena tres regimientos del ejército francés y estando en marcha los franceses, el general de los realistas de Valencia pretende ser el primero, generándose un conflicto con los franceses, por lo que el general francés lo somete a la deliberación del general Torrijos. Contesta éste que él ha capitulado con el general francés, y solo a él entregará la plaza, en su consecuencia, si los realistas intentan avanzar, serán recibidos a tiros.
A la vez que entran los franceses por las puertas de Madrid, las tropas de la guarnición salen por las de San José.
-1833. Es proclamada en Cartagena como reina de España Doña Isabel II de Borbón.
-1920. Es nombrado alcalde de Cartagena Don Salvador de Lamo Gómez.
-1946. Es investido alcalde de Cartagena Don Manuel Zamora Vivancos.
-1986. El Delegado del Gobierno en la región, el cartagenero Eduardo Ferrera Ketteter, ordena la clausura de la Plaza de Toros.
-1991. Carthagineses y Romanos. Se inscribe en el Registro de Asociaciones la Tropa Cartaginesa, TROPAS DE AMÍLCAR BARCA. Esta tropa fue disuelta.
-2009. El presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel Siso inaugura la nueva sede de la ONCE en la calle Calafate.