El Rincón Literario de Paco Marín: "El taxidermista"

El Rincón Literario de Paco Marín: "El taxidermista"

TÍTULO:     El taxidermista

AUTOR:      Juan Manuel Sainz Peña

EDITA:       Anantes (2018)

Encuadernación: Rústica con solapas. Tamaño: 15 x 22 cm. Número de páginas: 244. PVP: 18,00 €. ISBN: 978-84-948623-0-4

Varios son los hilos argumentales de El taxidermista. Uno, Darío López, acusado de horribles crímenes, nos da a conocer los acontecimientos que pusieron su vida “patas arriba”. Infancia cruel por tener un físico peculiar. Vida sin mucho éxito, ebanista de profesión, monótona hasta que…

El segundo hilo viene de la mano de Amandus Cicero, genovés, taxidermista, con una más que extraña colección. Excéntrico y millonario que no se ‘para en barras’ y siempre quiere más…

El último de los hilos tiene que ver con una serie de crímenes que se cometen en Madrid. Todos estos hilos se van entrelazando y corren en paralelo a lo largo de 38 capítulos y un epílogo.

Juan Manuel es un autor detallista… muestra de manera perfecta, tanto la bondad como la maldad. Retrocedemos en el tiempo gracias a su prosa fluida, elegante y muy poética. Se lee con ganas y sin desmayar en ningún momento. Dos buenos escenarios, el mencionado Madrid y Sevilla.

Madrid, 1629. El genovés Amandus Cicero atesora una de las salas de las maravillas más misteriosas de todo el Imperio. Su galería de errores de la naturaleza, oculta a los ojos del Santo Oficio, está a punto de enriquecerse con una pieza extraordinaria por la que el coleccionista está dispuesto a arriesgar vida, honra y fortuna. Mientras tanto, una serie de horribles crímenes sacude el Madrid de los Austrias. Varios artistas de la corte aparecen salvajemente asesinados y en las pesquisas del alguacil Parmenio Bablia el nombre que más se menciona es el de Amandus Cicero, el taxidermista.

 

Acabo, comentando que soy amigo de uno de los personajes, Jesús Tíscar. Quien me conoce, sabe que me conservo bien a pesar de la distancia con el año 1629.

 

Juan Manuel Sainz Peña (Jerez de la Frontera, 1970) es uno de los escritores más reconocidos del panorama literario nacional con cerca de 50 premios literarios en su haber en los últimos cinco años. En 2014 ganó el XXXIV Premio Internacional Casino de Mieres con El caso de Anne Brizard, en 2013 obtuvo el Premio Internacional de Novela Ciudad de Almería por El criado de Velázquez y en 2010 el Premio Nacional de Novela María Zayas por La edad de los héroes, así como innumerables premios de relatos.

Sainz Peña escribió su primer relato con nueve años, aunque no retoma la escritura hasta los diecisiete, edad con la que gana su primer concurso nacional. En su labor literaria destacan las publicaciones de las novelas La alargada sombra de la bayoneta (2000), El mensaje (2003), El juglar (2004), las mencionadas La edad de los héroes (2010) y El criado de Velázquez (2013), Piedras Negras (2013) y la recopilación de relatos A la hora convenida (2014).

Asimismo, Sainz Peña ha dirigido programas en Onda Jerez Radio, y colaborado con columnas semanales en las emisiones locales de la Cadena SER. Del año 2000 al 2004 escribió para Jerez Información la columna de opinión «Con la venia», aunque sus artículos se publicaron en muchas cabeceras del mismo grupo de prensa en Andalucía. Desde diciembre de 2004 hasta 2013 fue columnista, colaborador y crítico teatral de Diario de Jerez publicando más de 900 artículos para este medio. Desde mayo de 2013 es colaborador de Más Jerez, página digital de información en la que interviene con su sección de microrrelatos «Cuentometrajes».

Conversamos distendidamente con Juan Manuel Sainz Peña…

P.- ¿Quién es Juan Manuel Sainz Peña?

R.- Juan Manuel Sainz Peña nació en Jerez de la Frontera, Cádiz, hace 48 años, sintiéndose atraído por la lectura y escribir historias desde las los 9. Desde entonces ha querido seguir leyendo y, a su vez, contando historias mientras disfruta del oficio de escribir.

P.- ¿Cuándo, cómo y por qué nace El taxidermista?

R.- El taxidermista nace hace 4 años y es la precuela de El criado de Velázquez, Premio Internacional de Novela Ciudad de Almería en 2013. En realidad, El taxidermista nace como consecuencia del cariño que le cogí a Parmenio Bablia, el alguacil de la primera novela. Necesitaba volver a acudir a él y a esa personalidad de la que tanto disfruté.

P.- ¿Cómo se ha documentado?

R.- Gran parte de la documentación usada en El criado de Velázquez la usé para el taxidermista. Compré varios volúmenes de Delito y Piñuela que habla sobre muchos aspectos de la vida en la corte de Felipe IV. Pero también investigué mucho en internet sobre el precio de las cosas, sobre el vestuario, las comidas, las costumbres en general. Fue una tarea ardua pero totalmente imprescindible para ambientar la novela adecuadamente.

P.- Una novela negra ambientada en el Madrid de 1629, ¿es diferente escribir con la mente puesta en ese momento a escribir en el momento actual?

R.- Totalmente. Yo no quería escribir una novela negra donde aparecieran teléfonos móviles, ni ordenadores, pero tampoco la luz eléctrica, ni el menor avance actual ni de hace siquiera cien años. Quería un ambiente sórdido, pero también primitivo, de costumbres y posibilidades muy alejadas de la actualidad. Creo que el Madrid del siglo XVII cumplía de sobra con estas exigencias.

P.- ¿Ha tenido algún modelo para construir a Parmenio Bablia?

R.- No. Construí el personaje sin basarme en ningún individuo que yo conozca. Prácticamente ha salido de la nada, cosa que no ha ocurrido con otros personajes, en los cuales sí me he valido de autores amigos míos, con Pepe Quesada o Jesús Tíscar, por poner algunos ejemplos. Pero en el caso de Parmenio no hay bases que sustenten al personaje más que mi propia idea de cómo quería que fuese.

P.- ¿Cuál es su arma preferida a la hora de matar?

R.- Ya que estamos hablando del siglo XVII, es lógico que me gusten las armas de la época. De hecho, también tuve que investigar sobre las espadas y las dagas y otras armas de entonces. Aunque las ballestas, que son algo más antiguas, son armas que me gustan y que he usado en algún que otro relato.

P.- ¿A qué autor de novela negra admira?

R.- Pues en realidad no tengo ninguno en concreto, pero sí le diré que mi primer relato, con 9 años, lo escribí pensando en Agatha Christie, aunque también me gusta Josephine Tey o Conrad. Hay muchos y buenos autores. Por cierto, que tengo pendiente leer La japonesa calva, de Jesús Tíscar, uno de los autores de narrativa más completos en estos momentos, muy por encima de otros muchos autores de reconocido prestigio y quien merece, desde hace tiempo, un hueco entre los grandes. Tiene una pluma envidiable. Lo odio muy cordialmente,

P.- ¿Cuáles son sus géneros y autores favoritos?

R.- Pues no tengo autores favoritos, la verdad. Todos aquellos que sepan del oficio y cuenten algo interesante, me gustan. Pero claro, uno se tiene que rendir ante García Márquez, Cortázar y muchos de los clásicos que son, por otra parte, fuente de la que beber si uno quiere aprender a escribir en condiciones. En cuanto a géneros, me encanta el costumbrismo por encima de los demás.

P.- ¿Qué está leyendo ahora mismo?

R.- Tengo dos entre manos: Amar en los tiempos del cólera, de García Márquez, y Rey tiniebla, de Antonio Enrique, dos libros muy diferentes, pero igualmente hermosos.

P.- Como lector, prefiere: ¿libro electrónico, papel o audio libro?

R.- Ambos me parecen perfectamente válidos y compatibles. No hay porqué desechar uno u otro. Los dos vales. Yo, por ejemplo, utilizo los dos y los dos me llevan al sitio que quiero, que es la literatura.

P.- ¿Qué manías tiene a la hora de escribir?

R.- Pues que yo recuerde, creo que ninguna. Lo que sí es cierto es que necesito la música para escribir. Nada estridente, por supuesto, pero Bach, Corelli, Vivaldi. Chopin… Eso me es tan necesario como la tinta de mi impresora, valga el ejemplo, muy rebuscado y bastante pedante, por cierto.

P.- Relate alguna curiosidad literaria personal que le haya ocurrido y no lo ha contado hasta ahora.

R.- Pues una vez quise emular a Poe, a Lovecraft y todos estos autores que escribían ciegos de todo. Lógicamente no pruebo las drogas, nunca lo he hecho, pero oiga, unos cubatas si vendrían bien, así que una noche me preparé el primero de los que debían ser varios cubatas y me dispuse a escribir ciego. Ná. Al prime vaso me entró un sueñazo que no veas. Ni medo folio escribí. Me quedé dormido en el escritorio.

P.- Venda su libro ¿Por qué hay que leer El taxidermista?

R.- Escribo fundamentalmente por dos cosas: para entretenerme y para que la gente se entretenga con lo que escribo. Creo que El taxidermista es una novela entretenida, que engancha desde la primera escena, que es bastante dura, con el primero de los crímenes. Y que además mantiene la tensión hasta la última frase.

P.- Sus planes a corto y medio plazo ¿son?

R.- Pues estoy escribiendo teatro, que es un campo que no había explorado hasta el momento y me parece totalmente fascinante. Es muy diferente a la narrativa porque aquí no caben las descripciones ni los adornos. Aquí el planteamiento de la historia, el conflicto y su resolución se tienen que sostener en el diálogo de los personajes, y eso es un reto divertidísimo. Estoy muy contento con el hallazgo