Rincón Literario de Paco Marín: “La Fiscal”

Rincón Literario de Paco Marín: “La Fiscal”

TÍTULO:     La fiscal

AUTOR:      Natalia Gómez Navajas

EDITA:       Cosecha Negra (2022, septiembre)

Encuadernación: Rústica con solapas. Tamaño: 15 x 21 cm. Número de páginas: 366. PVP: 18,00 €. ISBN: 978-84-125903-0-2

Natalia Gómez Navajas demuestra en “La fiscal” que ha conseguido tener una cabeza muy bien amueblada y los pies en el suelo. Día a día, minuto a minuto se va superando y aprendiendo cada vez un poco más. Hay que ser muy buena “escribidora” para crear una novela como esta; no ya tanto por el contenido -que es impresionante en cuanto a los temas tratados- sino por el continente. El armazón de la historia es muy original: frases cortas, pensamientos rápidos, capítulos que te dejan con ganas de más y que, sin darte cuenta, vas saltando de uno a otro hasta que llegas al final de una manera que no te das cuenta y dices “¿Ya?”. Solicito un poco más, si es posible y Natalia lo considera pertinente.

Felicito a ‘Cosecha Negra’ por su publicación y animo a Natalia a que siga trabajando con el paso y el pulso firme, pues le auguro un futuro muy interesante.

«Lola Brau tiene una posición social elevada y un dilatado matrimonio que va haciendo aguas. Siempre se sintió una mujer segura de sí misma, de mano férrea, lo que la ha llevado a labrarse con el paso de los años una carrera profesional impecable, convirtiéndose en una fiscal de prestigio y respetada por sus compañeros.

Una noche recibe una llamada que cambiará el curso de su vida. David Burgos, su marido, despierta en una casa ajena. Junto a él se encuentra el cuerpo sin vida de una mujer cubierto de sangre. Todos los indicios apuntan a que el esposo de la fiscal es el asesino. La investigación se da por cerrada.

Pero, ¿Y si nada es lo que parece?

Brau tendrá que enfrentarse a un dilema: mantener su fe en los procedimientos judiciales o creer en la inocencia de su marido. Escoger entre la lealtad hacia una profesión que ama o luchar por las cenizas de un amor que parecía consumido.

Con todo en contra, la fiscal, con la ayuda de un detective que la odia y de un abogado qué apuesta por la inocencia de Burgos, comenzará una carrera vertiginosa para sacar la verdad a flote».

Natalia Gómez Navajas (Logroño, 1970). Autora de novela negra y comisaria de Rioja Noir, festival de literatura negra, policíaca y thriller de La Rioja. Estudió la carrera de Gestión de empresa en Madrid, regresando a su ciudad natal a su finalización. 

Debutó en el panorama literario con Tras el objetivo en 2016. Buzali. El origen (2017), que fue finalista al Premio de Novela Cartagena Negra 2018. la consagró como escritora del género negro. El mago y la daga (2018), resultó galardonada con el II Premio Literatura Ilustrada Villa de Nalda e Islallana.

Aras de venganza (2020) le otorgó el VII Premio del Libro Ateneo Riojano y fue nominada al premio mejor novela Cartagena negra y mejor novela Cubelles Noir.

Muchas gracias Natalia por compartir con tus lectores un ratillo de tu vida… Gracias…

P.- Por favor, recuerde quién es Natalia Gómez Navajas.

R.- Soy lo que se ve. Una mujer que se ha ido reinventando a lo largo de los años según las necesidades que surgían. Estoy en un momento muy dulce, porque he aprendido a escucharme y a quererme. Me siento muy a gusto conmigo misma, ya que he aprendido a disfrutar de lo que he conseguido, aunque sin dejar de trabajar en las próximas metas. Doy las gracias a diario, por la vida en general y por cada pequeño detalle. 

En cuanto a la literatura, soy feliz. El número de lectores crece cada día, algo que les agradezco con el corazón, y la segunda edición de Rioja Noir está en camino. ¿Qué más podría pedir? 

 

P.- ¿Cuándo, cómo y por qué nace "La fiscal"?

R.- La novela nace a raíz del personaje de Lola Brau. Quería saber hasta dónde podría llevar a una persona como ella, que tiene unas convicciones férreas, que no se desvía del camino que marca la ley y que de pronto la vida le asesta un gran golpe. Se ve envuelta en un asesinato y tiene que luchar contra lo que creía que era lo correcto. Podríamos decir que Lola y su vida son asépticas y la detención de su marido David la lleva a tener que nadar en aguas sucias. 

P.- ¿Cuánto tardó en redactarla?

R.- Algo más de un año. Me levanto a las 6:30 hs. para escribir y estoy hasta las 8:30 hs., de lunes a jueves. Los fines de semana y las vacaciones son para mi familia. Aprovecho mientras desayuno. El resto del día es imposible. Así que entre que puedo abrir los ojos y me tomo el primer sorbo de café, el tiempo que le dedico es muy poco. Me encantaría poder escribir más horas al día, pero hoy por hoy es imposible. 

P.- ¿Cómo se ha documentado?

R.- Con amigos abogados, ya que, aunque no tiene ambientación, el sistema judicial al que hace referencia es el español. No quería que hubiera los gazapos que suelen verse en series de televisión o novelas que se ambientan en nuestro país y hacen uso del sistema americano. Tuve la suerte de poder hablar con el teniente fiscal de La Rioja, respondió a todas las preguntas y las dudas que tenía, incluso más. 

La novela abarca otra línea que es el mundo digital. Nuestra privacidad. Le damos mucha importancia y abrimos las ventanas y puertas de nuestra vida a cualquier aplicación. Tengo un amigo informático que me guio para adentrarme un poquito en la DarkWeb. 

P.- ¿Tenía planificada, de antemano, la estructura de la redacción, muy ágil y novedosa, o iba saliendo según escribía?

R.- No, sigo dejando que la historia fluya y que los personajes y sus situaciones la vayan creando. Cuando me planteo una novela, la veo como la vida de los personajes que la forman. Yo no sé lo que me va a ocurrir de aquí a cinco minutos, así que no quiero que mis personajes lo sepan, prefiero que les sorprenda. 

P.- ¿Por qué enumera los capítulos: de menor a mayor y, en la segunda parte, de mayor a menor?

R.- La novela se estructura en dos partes. La primera parte acaba con Lola sumida en el abismo. Cuando comencé a escribir la segunda, me sugirió que era una cuenta atrás, para descubrir la verdad. Numerar los capítulos en orden descendente me pareció una buena manera de plasmarlo.

P.- ¿Sigue con su manía, entre otras, de: "...necesito una taza de café y una libreta con un bolígrafo junto al ordenador"?

R.- Sí, la taza de café no puede faltar en la mesa, y plasmar las ideas que me van surgiendo en papel me ayuda. Hace tiempo que leí que escribir a mano mejora la concentración y activa la memoria. La verdad es que, si en algún momento me atasco, el bolígrafo me suele ayudar. 

P.- Venda su novela, ¿por qué hay que leer "La fiscal"?

R.- Creo que es una novela ágil, dinámica e ideal si buscas pasar un buen rato lector. Algo diferente a lo que se está comercializando en estos momentos. Por lo que me han comentado varios lectores, es una novela que no puedes dejar de leer, los capítulos cortos ayudan. Además, nos hace reflexionar. ¿Es cierto lo que nos cuentan? Creemos que los países están en manos de los políticos que los gobiernan. Pero existen lobbys empresariales que dirigen la economía. Por otro lado, es una llamada de atención a ese mundo virtual que nos pone al descubierto sin saberlo. En definitiva 366 páginas para pasar un buen rato. 

P.- Sus planes a corto y medio plazo ¿son?

R.- No soy de segundas partes, pero los lectores me han pedido una fiscal 2 así que estoy en ello. Con Lola Brau y Miguel Bersué. Veremos a dónde nos lleva.