La teleoftalmología evita en un año 2.690 desplazamientos de pacientes al complejo hospitalario de Cartagena

La teleoftalmología evita en un año 2.690 desplazamientos de pacientes al complejo hospitalario de Cartagena
La coordinación entre Atención Primaria y el servicio de oftalmología evita duplicidades y reduce los tiempos de citación
Entre el 70 y 75 por ciento de los casos que se derivan de Atención Primaria son sospecha de cataratas
El servicio de Oftalmología del Complejo Hospitalario Universitario de Cartagena ha realizado en el último año hasta 13.216 consultas telemáticas con Atención Primaria consiguiendo resolver hasta 2.690 casos que no han tenido que desplazarse al hospital.
La coordinación entre los médicos de familia y los oftalmólogos ha conseguido evitar duplicidades y reducir los tiempos de citación consiguiendo además hasta un 20 por ciento más de huecos en agendas presenciales para poder ver otras patologías.
La mayor parte de estas consultas, entre un 70 y un 75 por ciento, se produce por sospecha de cataratas para lo que este sistema de trabajo ha permitido un 99 % de cumplimiento en los tiempos de demora y poder ver a los pacientes antes de 50 días como marca el real decreto.
Otro de los principales motivos de consulta desde Atención Primaria se produce por el fondo de ojo en pacientes diabéticos para los que se ha establecido una batería de pruebas de agudeza visual, retinografías o tomografías de coherencia óptica que realiza la enfermería, fundamentalmente.
La interconsulta no presencial en oftalmología permite, sin necesidad de ver físicamente al paciente, evaluar su caso y responder las dudas que pueda tener el médico de atención primaria. En lugar de derivar al paciente, el médico puede consultar al especialista a distancia, utilizando la historia clínica y otros datos y pruebas relevantes.
De esa manera se pueden ofrecer recomendaciones sobre el tratamiento, el seguimiento o, en su caso, la derivación a otro especialista vitando desplazamientos innecesarios y mejorar la accesibilidad disminuyendo la carga asistencial y ahorrando tiempo ya que los médicos de atención primaria reciban la respuesta a sus dudas de manera más rápida y eficiente.
Este tipo de actuaciones no reemplaza la evaluación presencial cuando por criterio clínica es necesaria pero es una herramienta útil que puede mejorar la accesibilidad, la eficiencia y la calidad de la atención oftalmológica.