Opinión

Montanaro: El asno y la piel de león

Andrés Hernández
Andrés Hernández
Montanaro: El asno y la piel de león

El asno y la piel de león

En cierta ocasión un viejo cortando leña y cargando con ella recorría un largo camino. Pero poniendo la carga en tierra a causa del cansancio del camino, invocaba a la Muerte. Cuando la Muerte se le apareció y le preguntó por qué motivo la invocaba, el viejo respondió: “Para que me levantes la carga”. Todo el mundo ama la vida, aun cuando sea desdichado en ella.

La desdicha, ese parece ser el estado social de una España lánguida y acomplejada, sumiso y ordinaria, quizás la indiferencia no sea norma de calidad pero la inacción y la holganza son ejemplares ante la putrefacción y contaminación de un sistema democrático que nos sirvió para el bienestar social y estar en vanguardia de los derechos y obligaciones, hoy solo obligaciones y estafados por una clase política de desvergonzados activistas de la extorsión y el chantaje, el ocio por la inacción en un comportamiento pseudo psicológico pasivo,  la  televisión y su basura mediática informativa, les escarceos deportistas y los sensacionalistas “realitys” son la fuente de energía de la mente actual española, las vergüenzas ajenas expuestas siempre han sido gratificantes en España y a eso sumamos una Eurocopa, unas olimpiadas y el mercado de verano futbolístico, tienes a los borregos recluidos.

Aquel longevo carácter indómito español ha desaparecido, volatizado y narcotizado. Un verano que ha conformado el cenit de la mayor degeneración política, económica y social de este país, con un protagonista destacado, además, escondido el tahúr como un cobarde entre bambalinas procreando la suerte del trilero, el menoscabo de la verdad y la insurrección de la indigna deslealtad con tintes social comunistas y, además, con acuarelas oscuras y tétricas bolivarianas, ordinarias y vulgares, el renegado e ingrato es Sánchez, además exhibiendo una chulería propia del delincuente, de vacaciones a 5 kilómetros de la devastación y colonización inmigrante y pasando.

Un sujeto que basa su particular éxito en inventar escándalos contra sus adversarios y en crear problemas para solucionarlos después, de político tiene mucho o nada, si es reaccionario sin duda lo es y Sánchez lo es, así no actúa un buen y honesto político sino un capo mafioso. A Sánchez le va bien estar en el poder, en un gobierno que no gobierna y sigue sin presupuestos dependiendo de socios tóxicos, el uso de eufemismos y palabras con capacidad de definir irrealidades y piruetas es el día a día, como crear la “inmigración circular”, otra estupidez sánchista. Las tácticas sucias para alcanzar el poder y en el caso que nos ocupa para mantenerlo no eluden los ataques al contrario, aunque sean falsos y el desarrollo de esas propias mentiras como realidades. El enfrentamiento dialéctico es continuo, pero con verdades y mentiras o falsedades que es difícil discernir. Tarea complicada para una sociedad imperfecta, manejable, honesta e ingenua contaminada por tertulias televisivas sectarias, sin expertos reconocidos, solo con idiotas contemporáneas a sueldo, otros como panfletos de la basura mediática.

Así, la degeneración a la que Sánchez ha sometido a España ha sido y es mayúscula, la lista es extensa, corrupción familiar tipo Soprano, no se escapa nadie, corrupción política intra e inter ministerial, corrupción económica golpista catalana, desfalco económico anticonstitucional, Constitución hecha un “trapo” ante la pasividad inerte de una oposición triste y apática, la invasión inmigrante procreada por la tóxica agenda 2030 y el negocio espurio del nuevo tráfico de esclavos del siglo XXI donde, empresas disfrazadas de solidaridad hacen un enriquecedor negocio consensuado por el silencio y la descompensación legal, dónde, el español que paga impuestos la sufre y la mantiene, unas veces en delincuencia proclive otras en los derechos desheredados en beneficio del invasor, otras desplazado y despreciado por la propia justicia, un caos de verbena como una balacera mejicana. 

España y por nuestra culpa inicio por ignorancia y confianza un camino peligroso con un difícil retorno que desemboca está desembocando en la antítesis de lo habido hasta ahora en esta España reciente. La Constitución se ha convertido en un guiñapo en manos de delincuentes traidores, las instituciones y entidades que deberían velar por su salvaguarda e integridad se han visto contaminadas con un muy alto nivel de toxicidad por los políticos subversivos de la izquierda radical ante la pasividad de la derecha conservadora, y nadie, ni la Corona, ha demostrado interés en detenerlos, en parar este ilegal clima anticonstitucional, este cambio de sistema que nos conduce irremediablemente al sinónimo de la actual dictadura a la venezolana, mediocre y denigrante, llenando el país de problemas inducidos para despistarnos de la oscura realidad, la inmigración ilegal y las piruetas dialécticas del gobierno, los insultos de xenofobia a los que piden sobrevivir a ella es un claro ejemplo, y luego, los borregos socialistas alabando y balando por su líder, en la Región de Murcia y en Cartagena, en rebaños, hay que comer..

Nunca un presidente en España ha sido tan sórdido y mezquino como Sánchez, nunca en España un presidente ha estado salpicado por la corrupción investigada en su familia, en su partido y en sus ministerios o gobierno  y nunca un presidente en España ha sido tan soberbio, arrogante, chulo y déspota aliándose con lo peor de cada casa, golpistas delincuentes haciendo su propia ley de amnistía y corrupción, creando farsas y circenses escaramuzas detractoras de la dignidad policial, terroristas asesinos con casi mil muertos en su haber y miles de víctimas, dando los criminales lecciones de civismo y procurando la excarcelación de los asesinos miserables, putas poligoneras disfrazadas de políticos nacionalistas despedazando la sociedad vasca y navarra, además de los comunistas parásitos, parásitas y parásites del sistema político actual, irradiando podredumbre e inmundicia pseudo política.

Decía Ernest Jünger, pensador y sociólogo sobre la Primera Guerra Mundial que, el pueblo alemán no podía ver las cosas con diferencias, por el contrario, todo lo veía igual. El alemán, decía el poeta, admitía sin cuestión una cosa que otra como igual y óptima, no discernían. En España hemos caído en ese oscuro pozo deteriorado. No todo es igual ni todas las ideas son respetables. La democracia es un sistema de valores, o lo era, de raciocinio y respeto con unos principios recogidos en leyes que se deberían cumplir, para establecer una sociedad sólida y segura. La democracia en origen es vivir en la igualdad y el respeto común. La izquierda la ha despedazado, ni igualdad ni respeto, solo caos, miedo y extorsión, nos quiere desiguales amparándose en ese absurdo de la diversidad en toda su denigrante extensión. Las reglas y hasta las leyes las desarrollan los tahúres y delincuentes. Así, además de la corrupción, nunca un presidente español como Sánchez se ha enfrentado después de provocarlo al chantaje separatista o el chantaje permanente de Marruecos, nunca se ha empleado tanto el bulo y la mentira como ahora, la amenaza y la extorsión para que lo institucional se traduzca en su propio interés personal. La gradualidad del foso se ha gestado en nuestra trompa en seis años y ajenos a la caída. Sí algún incauto creía que la libertad y la paz social eran gratis, estaba, estábamos.

España está a la deriva, nuestra descendencia ya conoce una España muy distinta erigida por unos principios distantes a los nuestros, distintos a los que nosotros hemos creado y algunos conocidos, valores de respeto e integridad hoy perdidos. Como dijo alguien por ahí, ni era gratis ni lo es y ahora, ¿quién paga la factura? El pueblo honrado, trabajador y sufrido, pero sin la generación estrella hoy en retaguardia por edad.

A colación de la falta de discernir entre el bien y el mal, escribe Hannah Arendt, historiadora y filósofa alemana que. "Mentir constantemente no tiene como objetivo hacer que la gente crea una mentira, sino garantizar que ya nadie crea en nada. Un pueblo que ya no puede distinguir entre la verdad y la mentira no puede distinguir entre el bien y el mal. Y un pueblo así, privado del poder de pensar y juzgar, está, sin saberlo ni quererlo, completamente sometido al imperio de la mentira. Con gente así, puedes hacer lo que quieras."

La oposición critica pero no reacciona, la ambigüedad es tangible, nadie habla claro de la falta de un plan de acción decisivo contra el sanchismo y esta deriva autoritaria y dictatorial, restituir los derechos empresariales y de autónomos y derogar las subidas de impuestos implementadas que nos ahogan a todos. La socialdemocracia, el social comunismo es miseria. Derrocarlo como la secta que es. Poner atención en el despilfarro del gobierno, limitar ayudas inertes y chiringuitos de corrupción. La lealtad laboral y la anular las reformas comunistas y los maquillajes estadísticos para acabar en datos reales, dando protagonismo a las PYME y autónomos que generan riqueza y trabajo. El reemplazo y revertir todas las leyes contra la propiedad privada y las empresas y dignificar el hogar y la propiedad como sacrosanta. Reestructurar como Italia la política de inmigración, ¿no hemos caído en el cambio del flujo migratorio de Italia por el cambio de su política y aquella célebre Lampedusa a España y Canarias?, nadie acusa a Italia de xenófoba, o sí. Si el Partido Popular no presenta un plan real que acabe con esta enfermedad socialista en España, fracasará más de lo actual en lo económico y en lo social, aunque gobierne.

"Era un país curioso, la mayoría de la gente inteligente dependía de un grupo de idiotas, era asombroso observar cómo este grupo de idiotas supervisaba, controlaba y dirigía, la suerte de los talentosos. Lo increíble es que el sector de los inteligentes, para contentar a los idiotas, comenzaron a empobrecer sus ideas, porque el grupo de idiotas no las entendían y así poco a poco los talentosos comprendieron que la única manera de progresar en esa comarca era tratar de contentar a los idiotas transformándose poco a poco en idiotas. La idiotización llegó lenta e inexorablemente. Lo curioso es que este proceso no fue percibido por los talentosos, de manera que la idiotización paulatina fue un proceso que algunos contemplaban incluso con alegría. Las ideas cada vez más idiotas de los talentosos producían una enorme aceptación de parte de los idiotas, que premiaban a los talentosos idiotizados con cargos cada vez más prestigiosos". Tato Pavlovsky. Psiquiatra argentino.

Una fábula como despedida, la del asno y la piel de león. Un asno, revestido con la piel de un león, era tenido como león por todos. Y se produjo una huida de personas y una huida de rebaños. Pero el viento, al soplar fuerte, le quitó la piel, y se mostró el asno desnudo. Entonces todos corrieron hacia él y lo molieron a palos con bastones y porras.

 

Andrés Hernández Martinez